RMMFI es una comunidad, y eso significa que la información y el apoyo no son unidireccionales.
Los empresarios de nuestros programas tienen una gran riqueza de conocimientos y experiencia que compartir con nuestro personal, sus compañeros y los voluntarios.
Intentamos aprovechar esa experiencia creando intencionadamente oportunidades de tutoría entre iguales y programas dirigidos por la comunidad.
Para nuestros Talleres de Graduados mensuales, siempre empezamos por buscar dentro de la comunidad emprendedora a la hora de contratar facilitadores.
Algunos ejemplos recientes de talleres dirigidos por empresarios son un taller de contabilidad con Rachelle Lukusa(Lukusa Business Concierge Services), un taller de contratación y subcontratación con Jessi Burg(Pears to Perennials) y un taller de mercado pop-up con Panya Heard(DittyPop Smoothies). También animamos a los graduados del campamento a que se ofrezcan como mentores.
Tras graduarse en la Clase 5 del Campamento de Entrenamiento para el Lanzamiento de Empresas de Aurora, Katy Gruenbaum se ofreció voluntaria como Entrenadora de Responsabilidad para la siguiente cohorte.
Katy está muy ocupada con su propio negocio de jardinería y paisajismo sostenible, New Earth: además de los 60-75 clientes individuales que tiene cada año, Katy está trabajando en múltiples proyectos de mayor envergadura, incluida la construcción de un invernadero y jardín botánico de 80 acres en Conifer.
Aun así, Katy dedicó tiempo a ser mentora porque quería seguir conectada a la red de RMMFI y ayudar a otros a beneficiarse del programa.
A través de su propia experiencia, Katy vio de primera mano lo valiosas que pueden ser para los nuevos empresarios la comunidad y la estructura que ofrece el campamento de entrenamiento.
Creía que era importante que hubiera otros empresarios en los equipos de mentores que aportaran esa perspectiva y experiencia únicas.
Como entrenadora de responsabilidad, Katy pudo sacar sus propias notas del programa, compartir lo que podía esperar y aliviar algunos de los temores que los empresarios suelen sentir al comienzo del campamento de entrenamiento.
Katy también siguió aprendiendo como mentora, desarrollando sus propias habilidades empresariales junto a la emprendedora a la que asesoraba.
Cuando los empresarios dirigen talleres o actúan como mentores, no sólo aportan su experiencia como empresarios, sino que también crean una red de éxito compartido.
Como dijo Panya cuando le preguntaron por qué quería ser facilitadora: “Pay it forward es más que el título de una película o una afirmación; es una llamada a la acción. Las pequeñas empresas tienen más posibilidades de tener éxito con una comunidad que las apoye”.