Hace casi diez años, Jasmine Douglas empezó a peluquear en su casa, con amigos y familiares como primeros “clientes”.
Aunque trabajaba en una empresa para mantenerse a sí misma y a sus tres hijos, el cabello y la belleza siempre habían sido las pasiones de Jasmine.
Sin embargo, fue en 2014, tras la pérdida tanto de ese trabajo corporativo como de un familiar cercano, cuando Jasmine decidió convertir su pasión en un negocio.
Tras graduarse en la escuela de cosmetología, Jasmine trabajó en un salón local durante un año, perfeccionando sus habilidades técnicas y construyendo su comprensión de la industria de la belleza.
Le encantaban sus clientes, pero una supervisora difícil y desalentadora hizo que el ambiente de trabajo fuera tóxico.
Su sueño era abrir su propio salón, un salón de lujo con todos los servicios, para llenar el vacío que veía en el sector de la belleza para las mujeres de color.
Para Jasmine, la experiencia de un salón es tan importante como la calidad de los estilistas.
Para Jasmine, el cabello es mucho más que hacer que una mujer esté guapa; Jasmine quiere que las mujeres se sientan guapas, seguras de sí mismas y fuertes.
Para Jasmine, Booji Beauty & Co. era la respuesta.
El Rocky Mountain MicroFinance Institute (RMMFI) entró en el viaje de Jasmine cuando llevaba un año en el negocio.
El Business Launch Boot Camp reforzó los cimientos de Booji a través de la educación empresarial y financiera, en coordinación con el coaching y el apoyo para reforzar los cimientos personales de Jasmine.
RMMFI reveló el “caso empresarial” del autocuidado.
Admite que el equilibrio entre el trabajo y la vida personal sigue siendo su mayor reto, pero reconoce lo fundamental que es su estabilidad personal para el crecimiento de su negocio.
Ya sean las pérdidas personales que iniciaron su andadura empresarial, ese primer supervisor de salón o incluso los matones de la infancia que se burlaban de ella por ser “booji”, Jasmine ha utilizado todos los retos como combustible para el éxito personal y empresarial.
En última instancia, imagina Booji Beauty & Co. como un negocio impulsado por una misión que trabaja para apoyar y empoderar a las supervivientes de la violencia doméstica.
Con sus habilidades y su pasión, junto con el apoyo continuo y el desarrollo de capacidades de RMMFI, Jasmine está utilizando la propiedad empresarial para generar riqueza para sí misma, para sus hijos y para su comunidad.